¿Cómo afectan los cambios de presión en nuestro abdomen?

por Elena Marqués

Los cambios de presión en nuestro abdomen podrían dar mucha información acerca del estado de tu suelo pélvico. La cavidad abdominal está formada por cuatro paredes: musculatura abdominal por delante, musculatura y complejo lumbar por detrás, el suelo pélvico tapizando la parte de abajo y el diafragma cubriendo la parte superior. En su interior encontramos diferentes vísceras del cuerpo, como pueden ser el estómago, los intestinos o la vejiga. La presión intraabdominal fluctúa alrededor de 5mmHg en las personas adultas sanas y se modifica con cosas tan básicas como la respiración, el habla, la tos o cualquier otro tipo de esfuerzo. 

La presión en nuestro abdomen

En condiciones normales, las paredes de la cavidad abdominal deberían contrarrestar estos cambios de presión intraabdominal y adaptarse a ellos, pero hay veces en las que esto no sucede así, dando lugar a distensión abdominal (diástasis, hernias abdominales, etc) o prolapsos (descolgamiento de vísceras pélvicas), entre otra sintomatología. 

Si nos centramos en la evaluación abdominal, podemos realizar algunos test en los que solicitamos que la persona realice un esfuerzo y observamos cómo se comporta el abdomen, tanto visual y manualmente como a nivel ecográfico. Esto nos ayudará a determinar si es competente o si, por el contrario, es necesario realizar un abordaje terapéutico en el que trataremos aspectos tales como la conciencia corporal, la tonificación abdominal y de la musculatura de suelo pélvico,  la implementación del abdomen en el resto de actividades (tanto del día a día como deportivas) y la mejora de la eficacia del trabajo hiperpresivo. 

Test del globo

Uno de los test fáciles y asequibles que se pueden realizar en casa, para determinar si el abdomen es competente, es el hinchar un globo. Deberás ser capaz de inflarlo sin que el abdomen se abombe (¡ni tampoco el suelo pélvico!). Si tras varios intentos, no lo consigues, podría ser un síntoma de que algo en tu coordinación abdominopélvica no está funcionando bien. 

En consulta, realizaríamos una valoración más exhaustiva para, si fuese necesario, proponer un abordaje centrado en la prevención de patologías, como diástasis abdominal o prolapsos pélvicos, y la recuperación del patrón normal de ejecución.